El pasado domingo 13 de octubre, 10 socios del club nos desplazamos hasta Poza de la Sal, localidad burgalesa donde algunos de ellos veranean, así que a Julen y Alain acompañados de otro local (Andoni) les toca hacer de anfitriones, para llevarnos por «El Infierno Pozano».
Esta vez, tuvimos suerte y ese Infierno no fue tal, el día se levantó con una temperatura perfecta para salir en MTB y gracias a la tormenta que pasó por allí el sábado a la tarde el terreno nos los encontraríamos perfecto para disfrutar de esos famosos senderos de los que tanto presumen los lugareños…
A las 9:15 comenzábamos la ruta, y para calentar 4 km de pistas variadas que nos llevaban al primer sendero del día y no defraudó, al llegar al final salían las primeras sonrisas en el grupo, esto prometía. Seguimos ascendiendo poco a poco por pistas y algún sendero hasta llegar a lo que más nos gusta, otro sendero de bajada hasta Padrones de Bureba, este con el premio de reponer agua de la fuente, que según nuestros guías locales «no hay mejor agua que esta», así que a vaciar el agua con cloro de nuestros botellines y repostar con agua mineral de la fuente. Ahora sí, una vez repuestas las energías y recorridos 14 km cómodos comenzaba la parte más dura de la salida, ascender hasta los primeros aerogenradores por el cañón del arroyo Cantabrana. Un sendero muy exigente, con algún tramo del 28% y con varias «zetas» que ponían a prueba nuestra pericia técnica, cada uno marcaba su propio ritmo, 3.5 km que recorrimos en 25 minutos, son de esos tramos que te hacen exprimirte pero que cuando llegas arriba celebras con tus compañeros de aventura y comentas cada uno de los pasos, las zetas, la rampa del 28%, el paso por las tablas y lo divertido que es subir por senderos y dejar las pistas a un lado.
Nos lo hemos ganado, toca el momento de sacar la barritas, la fruta, etc… y reponer energías a la vez que reagrupamos el grupo, roto por esta subida. Seguimos nuestro camino y en pocos metros nos encontramos otro sendero, y a este en Strava le llaman «Funny DH», un sendero muy rápido donde llegamos a ponernos a 40km/h, nuestra sonrisa va creciendo… aunque todo lo bueno se acaba pronto… y comenzamos a ascender al «Páramo», esta vez nos toca hacerlo por pista y con una rampa final 300 metros al 20%, toca apretar riñones y patas. Al llegar arriba se entiende porqué podemos contar los aerogeneradores a cientos, el viento en esta zona es muy fuerte así que en grupo nos acercamos a uno de los tramos más esperados del día, la bajada a Castil de Lences entre encinas. Dos kilómetros de bajada muy cañera y rápida, entre troncos de encinas por las que pasamos rozando nuestros manillares, en alguno de los tramos podemos ver las marcas que nos alertan de obstáculos más pronunciados o incluso un vallado de plástico naranja que nos impediría caer donde no debemos… las sonrisas siguen en aumento e incluso algunos llegamos pegando algún grito de alegría, esto es MTB!!
Afrontamos la parte final de nuestro recorrido de hoy, que comienza con una subida de 2.5 km que nos llevará hasta el ultimo sendero del día, una bajada entre encinas para recordar y que quedará marcada en nuestras retinas, en las que nos dejamos llevar por la rueda de nuestros compañeros, siguiendo a los locales y al «endureta» del grupo, ya que una buena rueda en estos senderos es muy importante para disfrutarlo al 100%, ir a vista por senderos retorcidos y con tanta encina es complicado, pero todos la salvamos sin incidentes y nos agrupamos justo antes de comenzar la «Senda Pozini» un sube/baja continuo y muy divertido que nos llevará hasta Poza de la Sal. Pero antes de poder «hidratarnos en la plaza del pueblo» nos toca ascender hasta el Castillo de Poza de Sal, disfrutar de las vistas desde allí y hacer la última bajada.
Ahora sí!!! Nos reunimos en la plaza del pueblo, reponemos líquidos y nos preparamos para ir a comer!!! Premio merecido después de una ruta espectacular por el «Infierno Pozano», que gracias a la compañía, al buen ambiente y a las risas, no lo ha sido tanto…
David Salicio